JOSE MARÍA ALONSO. POEMARIO #01

A modo de introduccion. # 1

 

Desde hace mucho tiempo, venía rondándome en la cabeza la intención de realizar unas entregas para mi Ateneo’s (Alas con Secuencias) sobre la obra poética de Jose María Alonso. Una gran compositor, un gran poeta, un gran amigo.

 Aunque había una situación adversa probable que, al final, mira tu por donde, se cumplió. Tal y como me temía.

 Sospechaba, y a eso me refiero, que me acontecería la circunstancia de despertar el recuerdo doloroso por la muerte de un amigo. Del amigo.

 Nota del autor: La palabra “Amigo” va salir en estas entregas hasta la saciedad; pero no quiero sustituirla por sinónimo alguno…así que… eso es lo que hay. Reiteración afectiva que se llama.

 Estábamos, continúo, hace un par de semanas almorzando con un común de Chico (Jose María) y mío: Diego Guzmán. Hermano circunstancial de ambos.

Le comenté, envalentonado por las copas de sobremesa y por el anhelo de hacer este trabajo, mi intención oculta. Intención  que no era otra que la de publicar un poemario de Jose María Alonso y la necesidad ineludible de recabar la información que tuviesen su ex mujer o incluso su madre.

  Diego, porque no me extrañará, saltó como un resorte y me dijo….

 – Ni de Patricia, ni de Maruja!  Si alguien tiene material y mucho de la obra de Chico… ese es Quino. Y cogió el teléfono. Sin derecho a réplica.

 Ni soso no perezcorto (sé que le encantan estos juegos de palabras) llamó ipso- facto a Quino.

 Este, le contestó inmediatamente a la pregunta de si tenía algo de Chico para ponerlo a mi disposición. Contestó con un lacónico…Todo!!!

  Y como un perfecto caballero que es, pondría, afectuosamente, todo ese material a mi alcance.

 Nos puso, Diego, en contacto de nuevo -después de años de ausencia involuntaria – a Quino y a  mí.

 Y quedamos. Quedamos, por fin, en el palomar de Diego. Una magnifica y cordial velada llena de anécdotas que acabó con un cierto componente etílico y el corazón repleto de emociones contenidas.

 Y pasaron por mis manos manuscritos del poeta, y el libro de poemas publicado  igual al que se me había perdido a mí en una de esas mudanzas imposibles.  Y volví a ver las fotos que nunca se habían perdido, porque muchas de ellas estaban desde siempre, reveladas en mi memoria. Y volví a oír su voz. Y ahí, entonces, ahí si que me quebré.

 Se habían cumplido de forma precisa todos los malos augurios referente a lo penoso que podía ser el volver a leer (y oír) la palabra del amigo ausente. Muy doloroso.

A modo de agradecimiento.

 

Le expuse pues a Quino que lo que yo pretendía, no se trataba de realizar ningún panegírico ni trabajo rememorador acerca de Chico. Que para eso ya había un magnífico trabajo biográfico elaborado por el mismo. Su mejor músico. Su mejor amigo. El mas fiel del antes, el mas fiel durante el después.

Así que, para poder refrescar la memoria, me puse a leer la susodicha biografía….No se puede mejorar lo inmejorable, me dije: sobre todo cuando sale tan adornado de sentimientos.

Podéis leerla desde aquí: http://www.guateque.netfirms.com/biografiajosemariaalonso.htm

 Tampoco se trataba de relatar una sinopsis gráfica de la vida artística de Chico, pues de eso se había encargado otro gran amigo común. Común de todos: Rafael Díaz Portillo “Didi”.

 Didi en su página   http://www.guateque.net/josemariaalonso.htm   pone al alcance de todos una serie de fotografías y de palabras -emocionadas y preciosas palabras- que nos acercan más aún al artista y a la persona. Que tanto  monta.

 A MODO DE PRÓLOGO.

 

Así que les dije, que el trabajo al que me enfrentaría, sería – tal y como he hecho con otros amigos artistas- tan solo el transcribir su obra poética. Siguiendo la pauta habitual de un prolegómeno corto, una serie de imágenes ajustadas y precisas y, finalmente, una música cuidadosamente elegida que dieran el compás adecuado a la lectura.

Sin embargo, no quise- aunque al principio era lo que me pedía el cuerpo y además, era lo más fácil- hacer un trabajo atormentado. Con música pausada. Un relato oscuro.  

No. Esta vez quería hacer algo alegre; con color. Algo que contrarrestara el dolor y la pena producida por la ausencia irreparable.

 Y a ello me he puesto.

 Así que no habrá una sola foto de Chico en todas las entregas. Solo la que ahora encabeza esta primera. NO habrá más.

 Para ilustrar cada uno de los poemas, he elegido una serie de pinturas de Alfred Gockel que estoy convencido que a el le gustarían. Salvo las primeras que serán otras ilustraciones que ya están debidamente guardadas y registradas y que encabezarán los posteriores trabajos.

 En cuanto a la música…pretendo poner al principio de cada relación poética, algún video musical que nos hubiese intervenido a Jose María Alonso y a mi, personalmente. Este primero, será un tema de un grupo que nos fascinaba a todos: Gentle Giant, de la época en que compartíamos casamata Diego y yo en la Tierra  Media del Camino de los Ingleses del Soler.

 Muchas veces, acabábamos entonando a voces y dirigidos por Chico el On Reflections del citado grupo. Formará este video, parte de próxima entrega.

 Que tiempos!

  Una ultima reflexión. Todos tenemos amigos. Muchos amigos. Pero solo consideramos íntimos a unos pocos.  A Jose María le pasaría igual, supongo. El ejemplo mas claro es Quino.

 Pero sí había una tónica general en todos los amigos de Chico: Que todos lo considerábamos a él, nuestro íntimo. Era un honor ser su amigo Su querido amigo.

 Tralarí, tralaró.

Que grandes son mis amigos.

Tralarí, tralaró

Pan con manteca y Pipo.

 

 

JOSE MARÍA ALONSO. POEMARIO # 01

( Estos primeros poemas que a continuación se pueden leer,  figuran todos ellos en el libro editado en 1972   «Poemas y Canciones»  cuando Jose María contaba 19 años de edad.

En esta publicación, ya se observa, la enorme capacidad y sensibilidad poética de Chico Alonso. )

# 01

 

 

Pesado, lento, dormido.

Nada aparece con vida.

Todo es quietud y es olvido

mientras la injusticia anida

El plomo del sol oprime

los umbrales de la tarde

Tan solo la rueda del carro gime,

El terral quema… arde.

El silencio ofende, muere la tarde.

# 02

 

Tienen tus ojos sabor

a decepciones calladas,

a dolor oculto

a lágrimas

Tienen tus ojos color

de nube disuelta en agua

de soledades de amor

selladas

Tienen tus ojos

Mi ser, preso en su mirada

como una repetida oración

inacabada.

# 03

 

He arrancado mis ojos y los he puesto

sobre tus senos.

He clavado mis uñas en tus sienes

y he devorado tus cabellos.

Y la sangre que brotaba de mis labios

la he vertido en un vaso

y te he dado a beber la mitad.

Hoy he ganado la partida.

la noche huele a sabor caliente

y a hijo.

Después he bebido mil veces

de un botella llena de arena

hasta caer borracho

en un suelo de piel mojada.

Al despertar, te he visto

envuelta en mañana

y he asesinado al silencio en mi garganta

para gritar que he vencido

Tú reías debajo de un árbol

envuelta en escarcha.

# 04

 

Las cinco:

                 Mi alma espera…

Las seis:

                  Mi alma espera…

Las siete:

                  ¿Ya viene?

                                      mi alma cree.

Las ocho:

                    No es ella!

                                      mi fe se quiebra

# 05

 

Se llama como lo llamen,

tiene alma de poeta

y un pedazo de su vida

guardado en una carpeta.

Conoció viejo el amor

y tiene en sus ojos la huella

del alcohol y del dolor.

Amó una vez, solo una

-murió borracha de luna-

Y dicen que por las noches

acompañando a una vela

lee y relee los versos

que guarda en esa carpeta

y que llora como lloran

los niños que no juegan.

Tan solo quiso una vez

y no pasó de la puerta.

# 06

 

Con un puñado de tierra en la boca

borracho de soledad y recuerdos,

me iré sin quebrar silencios

Con un libro de hojas blancas

                                       sin tiempo

Y me miraré en las aguas

y me veré.

                  Como se ve a un extraño.

Los ojos cerraré al andar

y mis pies me llevarán despacio.

Y cuando empiece a recordar

y sienta huecas mis manos

ya me habré ido…Yo!

Sin mañanas blancas de cielo raso

sin besos fingidos,

                                    sin clavos.

Seré solo el hombre imperfecto

y suicidaré al hijo en un alto

para seguir caminando sin puerto

yo, solo, sin trabas.

Tendré entreabierto los labios

como en un perpetuo beso…

Con un puñado de tierra en la boca,

borracho de soledad y recuerdos,

me iré sin quebrar silencios

sin más morral que mi cuerpo.

 

Podéis oir la voz y la música del poeta bajándoos este Power Point que he creado desde aqui:

http://cid-9b5ad4b7dbd9e872.office.live.com/self.aspx/JOSE%20MARIA%20ALONSO/JOSE%20MARIA%20ALONSO.%20NANA.pps

 

3 respuestas

  1. Querido Álvaro, son las doce y pico de la noche (viernes 5, no, sábado 6), fue ayer ¿o antes de ayer?, cuando nos encontramos con nuestro querido Diego en esa velada de risas, recuerdos y un poco de alcohol de 40, jajaja, y fue ahí cuando te di mis primeras entregas del material que poseo de Chico y me encuentro en esta madrugada de no se que día que ya estas trabajando con el mismo. Me he tenido que levantar y cosa que no es frecuente estando en casa me he tenido que tomar un chupito de ron para quitarme el nudo de la garganta. Maravillosa presentación amigo. Nos vemos mañana o pasado mañana domingo para disfrutar de otro buen rato y de una buena paella o al menos pretendo que me salga buena y si no, no importa pedimos unas pizzas, jajaja

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  2. MUCHAS GRACIAS ALVARO POR ESTE TRABAJO Y A QUINO, QUE ES COMO UN LIBRO REPLETOS DE COSAS DE MI HERMANO .TAMBIEN TE DIRE QUE AQUI TENGO «TODO » ES PARA MI UN HONOR ENORME QUE AUN SE SIGA RECORDANDO . GRACIAS Y UN FUERTE ABRAZO (SI ME PER
    MITES, QUERIDO AMIGO)

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