TITALÍN
No, no creáis que es la marca de un limpiador de plata. Aunque pensándolo bien, si que pudiera haberlo sido. Y, pensándolo aún mejor, eso es lo ella fue. Una bruñidora familiar incansable. Cercana y afectuosa.
Vigilante tenaz. Perfecta subalterna de la principal. Siempre dispuesta, aunque un tanto irritable. Un trozo de bizcocho empapado en pena y dolor asumido. En interminable constancia.
Incongruente con los sentimientos lógicos del rencor y la animadversión. Hacia aquellos que le quitaron la única oportunidad que le brindó la vida de prolongar la de ella misma. De una fidelidad absurda e irracional hacia los que la privaron de esa suerte exclusiva que tanto envidió al contemplarla -en su propia casa- diariamente.
Nunca entendí a Titalín ¿O si?
Presencia perenne hasta el final. Hasta que su razón hizo mutis por el foro silenciosa y calladamente. Ya nunca volvería a vigilarme por la rendija de la puerta entreabierta. O entrecerrada.
Titalín. No, no creáis que es la marca de un limpiador de plata. Aunque pensándolo bien, si que pudiera haberlo sido.
# 01
POEMA PARA UNA MUJER QUE QUIERE
Triste,
Tal vez con gesto acabado
Pero con fuerza en su cuerpo.
Enferma de franquismo y de una historia
De una España que nació mientras dormía
Quizás un poco standard de su mundo
Un poco música vibrando entre su espacio
Residuos de una época enterrada
Convencional, tradicional, conformista.
Una mujer que quiere, enamorada
De unos sueños que rompieron su esperanza
Bostezando en una tierra “pervertida”
Llorando en un mar de fuerza expirada
Latiendo en un corazón que habita en nuestros cuerpos
Derrochadora de amor de sus casi hijos
Nostalgia de una tierra en que vivió
De una tierra que supo abrirse
Para dar a luz a un cuerpo ilusionado
Típica mujer estrechamente atada
A un”fascismo” que “libró” a su país.
Sentada siempre en un rincón
De espaldas a la luz, al mundo
Por no ver el excremento de una tierra;
Sensible mujer que llora por cualquiera
Que ama lo bueno que perfuma al mundo
Mujer que llora con la muerte
Mujer que odia el llamado terrorismo
Mujer que cree pasar entre silencios
Pero que sabe gritar y hacerse eco,
Que vive en el corazón de nuestros cuerpos
Y en fin
Es este, un poema para una mujer que quiere.
# 02
Siento vacía mi almohada
Faltan partes de mis sueños
Siento que no queda nada
Siento tristeza en la cama
Siento que soy más pequeño
Siento que tu olor no es mío
Ya no siento tu calor
Y mi cuarto está vacío
Siento cada vez mas frío
En el que fue tu rincón
Está la mesa más vieja
Ya no me quedan poemas
Solo me quedan las quejas
Y cuando la noche empieza
Todo mi cuerpo se quema
Ya ves que no tengo luz
Desde que no estas aquí
Desde que te fuiste tú
Ni el mismo cielo es azul
Dime que te queda a ti
# 03
Tienes que saber,
Que una sonrisa tuya puede hacer
Cambiar lo noche por madrugada
Hacer mas corta una hora larga
Hacer presente aquel lugar
Tienes que saber,
Que una sonrisa tuya puede hacer
Que nuestras flores que están marchitas
Dormidas en palabras escritas
Vuelvan de nuevo a nacer
Tú haces la noche mas clara
Tú haces la nieve más blanca
Tu haces que el río que se estanca
Vuelva a correr y no pare.
Tu haces que en todas mis noches
Vuelva a verte en mi almohada
Tú haces la espiga del viento
Tu haces el todo del nada
Por eso
Tienes que saber,
Que una sonrisa tuya puede hacer
Que en mis noches ya no llore.
# 04
… Y sigue eternamente el silencio
Aunque preguntes mil veces,
Aquí y allá
Ya te han dicho lo que eres
Y a quien tienes que creer
Y a quien no
Ya te han dicho quien es bueno y quien es malo
… Mucho antes de nacer.
Yo viviré cinco minutos mas que tu.
# 05
Tú sabes amor?
Tú sabes que te quiero cuando nadie te quiere?
Cuando estás a punto de estallar,
Cuando tus lagrimas son mas osadas que tu orgullo
Cuando sientes tu alma agobiada
Cuando no hay salida,
Cuando es el final de algo que tu crees que no ha tenido principio
Cuando lloras para ti,
Ahogando sollozos que desearías gritar y gritar.
Cuando has llegado a entender el ciclo de la vida
Eres hija, eres mujer, eres esposa, eres madre.
Parece mentira, verdad?
Hasta ahora, era hasta fácil vivir.
Las responsabilidades no eran tuyas
Eran de tus viejos
Y era como si la miseria no existiera,
Como si todo fuera normal.
Unos eran ricos y otros eran pobres
Parece mentira verdad?
Ahora ya todo es nuestro,
Lo bueno y lo malo
Y nos dá coraje, no queremos
Queremos seguir inconscientes
Echando la culpa a otros.
Ahora, la culpa es nuestra,
Hemos cogido el testigo,
Ya nos lo decían: Es cuestión de años,
De tiempo, de un instante.
Tú sabes amor?
Te quiero cuando nadie te quiere.
Porque yo soy el único que te quiere
Y es que como te quiero yo,
No puede quererte nadie
Porque nadie ha tenido ese instante como yo
Tú sabes amor?
Te quiero porque eres madre
Y me das la oportunidad de ser padre.
Gracias.
Te quiero.
# 06
Ya no sé a lo que escribir
Parece,
Que se me han ido los pensamientos
Y no quieren volver,
Que han escapado de la locura de mi mente
Por miedo,
A sufrir indescriptibles torturas,
De mi verdugo, la cabeza.
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